Zoe Gotusso nos presenta su segundo álbum de estudio, Cursi. Con una producción cuidada y colaboraciones de peso, este disco marca una nueva etapa en su carrera, explorando un universo sonoro que apuesta por la honestidad y el despojo emocional. Cuatro años después de su primer disco, Gotusso regresa con una obra que es, en sus propias palabras, una “consecuencia del amor” que recibió durante su extensa gira, un agradecimiento a su público y una invitación a explorar sentimientos profundos, sin máscaras ni reservas.
“Cursi” es el nombre que Zoe eligió para este álbum, y no es casualidad. En un contexto musical en el que muchas veces se teme a la vulnerabilidad, Gotusso se permite ser “cursi”, abrir su corazón y compartir su lado más sentimental. Cada canción refleja emociones que atraviesan sin filtros, recordando que la música es una vía para comprender el amor, la nostalgia y la melancolía. A lo largo de sus 13 temas, Zoe teje una narrativa honesta y profunda que refleja su propia evolución, tanto personal como artística.
La producción del disco estuvo a cargo de Cachorro López y Diego Mema, quienes han sabido captar la esencia de Gotusso y llevarla a nuevos horizontes sonoros. Con influencias que van desde el pop hasta la música alternativa y elementos de la música latina, Cursi es un disco que, aunque arriesgado en su temática, se siente fresco, maduro y perfectamente cohesionado.
Bomba Estéreo aporta su energía característica en “Voy a olvidarme de mí”, una canción que evoca el poder catártico del olvido y el despojo. Paulinho Moska, por su parte, aporta su sensibilidad brasileña en “Pensando em Vocé”, una balada que encuentra en la fusión cultural un puente hacia la introspección y la conexión.
Un equipo de lujo para una producción impecable
Además de López y Mema en la producción, Cursi cuenta con un equipo de músicos de primera línea que acompaña a Zoe en este proyecto. Diego López de Arcaute y Sergio Verdinelli aportan sus habilidades en la batería, mientras que Germán Wiedemer y Ariel Polenta se encargan de los teclados. La inclusión del bandoneón de Gabriel Merlino en ciertas pistas añade un toque de melancolía tanguera, un guiño a las raíces culturales de Gotusso que enriquece aún más la atmósfera del disco.
La artista también contó con el apoyo visual de la ilustradora española María Medem, quien ha trabajado en los visualizers e imágenes de cada canción.
El tracklist de Cursi ha sido cuidadosamente seleccionado para llevar al oyente en un viaje emocional. Canciones como “Vivir” y “Lara” exploran el amor y el deseo desde una perspectiva vulnerable y sincera, mientras que “No hay nadie como tú” y “Entrégate” ahondan en la búsqueda de la identidad y el despojo emocional.
La construcción del álbum es meticulosa y cada canción parece estar estratégicamente colocada para crear una atmósfera que evoluciona, llevándonos desde la emoción contenida hasta la explosión catártica. La balada “Amar y Partir” explora el amor en su forma más pura, mientras que “Superpoder” cierra el álbum con una nota de optimismo y empoderamiento.
