Mau y Ricky en su último paso por Montevideo, Antel Arena | Foto: María Noel Robaina
El dúo venezolano Mau y Ricky, ha lanzado su tercer álbum de estudio, “Hotel Caracas”. Este disco marca un regreso a sus raíces venezolanas tras quince años de ausencia y se presenta como su trabajo más personal y auténtico hasta la fecha. La producción no solo destaca por su contenido musical, sino también por la profunda conexión emocional que los hermanos Montaner han establecido con su país natal durante el proceso creativo.
“Hotel Caracas” es un viaje auditivo y visual a la tierra que vio nacer a Mau y Ricky. Con 15 temas que abarcan desde baladas íntimas hasta reguetón, el álbum refleja los diferentes matices de sus experiencias y emociones. Cada canción se convierte en una pieza del rompecabezas que representa sus vidas y su evolución musical.
Ricky Montaner describe el proceso de creación del álbum como una experiencia profundamente sanadora. Aprovechando una pausa en su agenda debido al nacimiento del hijo de Mau, los hermanos se sumergieron en la composición y producción de este proyecto. No se trataba solo de hacer música; cada detalle fue cuidadosamente planeado, desde el diseño del uniforme que utilizarían durante las grabaciones hasta la creación de una llave simbólica que representa la conexión con su comunidad de seguidores.
Colaboraciones
El disco cuenta con varias colaboraciones, como “Gran día” junto a Guaynaa, “Hasta olvidarte” con Arcángel, y “Espectacular” con Ilegales. Además, temas como “Canción 2”, escrita por Ricky para su esposa Stef Roitman, incluyen elementos personales como el primer audio que ella le envió tras su primera cita.
“Hotel Caracas” incluye una ambiciosa propuesta visual. Los videos musicales y un próximo documental fueron filmados en Venezuela, capturando la belleza y esencia del país. Durante la pre-producción, que duró entre dos y tres meses, Mau y Ricky junto a un equipo de más de 200 personas, recorrieron el país para plasmar su historia y paisajes en imágenes. Esta travesía les permitió presentar una visión genuina de Venezuela al mundo.
En una conversación sincera, Mau y Ricky destacan la importancia de la salud mental y la familia en sus vidas. Mau comparte cómo el viaje de regreso a Venezuela fue un proceso sanador, permitiéndole reconectar y sanar viejas heridas. Ricky, por su parte, enfatiza cómo mantenerse creativo es fundamental para su bienestar mental. Ambos coinciden en la importancia de hablar abiertamente sobre estos temas, señalando que la vulnerabilidad y la transparencia pueden desmoronar los “monstruos” internos.
