La historia de The Magic Numbers no se escribe con fuegos artificiales ni escándalos mediáticos. Es una historia de constancia, de belleza sin apuro, de canciones que encontraron su lugar en el corazón de quienes nunca necesitaban más que una guitarra limpia y una armonía bien cantada para sentirse acompañados. Veinte años después de su debut, la banda británica vuelve a Buenos Aires con la discreción que los caracteriza y un setlist cargado de oficio y una profunda conexión con sus fans sudamericanos. La cita será el 4 de octubre en el Teatro Vorterix. Las entradas ya se encuentran a la venta a través de All Access.
Hay algo de milagroso en que los Stodart y los Gannon (dos pares de hermanos unidos por la música, no por el marketing) hayan sobrevivido veinte años en una industria que rara vez premia la delicadeza. En una época donde las modas duran menos que una historia de Instagram, The Magic Numbers siguen siendo una anomalía: una banda con alma, sin prisa, con canciones que no tienen fecha de vencimiento.
Sobre The Magic Numbers
Desde que aquel debut homónimo irrumpiera en 2005 como una bocanada de aire fresco en la escena indie británica (justo cuando el revival post-punk ya comenzaba a repetirse a sí mismo), el cuarteto dejó en claro que su brújula emocional apuntaba hacia otra parte. Canciones como “Forever Lost” o “Love Me Like You” no son hits en el sentido tradicional: no buscan epatar, sino abrazar. Son piezas cálidas, melódicas, honestas hasta el hueso. En su mejor versión, The Magic Numbers suena como si Teenage Fanclub y The Mamas & the Papas se hubieran encontrado en un pub de Kilburn a compartir sus penas.
El éxito de ese primer álbum fue inmediato, pero no ruidoso. Entraron directo al Top 10 británico, sí, y se llevaron una nominación al Mercury Prize, pero lo que realmente los definió fue ese culto silencioso que se armó alrededor de sus melodías suaves y sus letras dolidas. Eran, en esencia, lo opuesto al britpop que había marcado la década anterior: no había cinismo ni grandilocuencia, sólo la búsqueda incansable de una belleza sencilla.
A lo largo de los años, The Magic Numbers nunca buscaron reinventarse para seguir vigentes. En lugar de eso, profundizaron su lenguaje, pulieron su identidad, refinaron sus emociones. Compartieron escenarios con leyendas vivas como Neil Young, U2 o Brian Wilson, pero nunca perdieron su lugar en el margen. Participaron de festivales imponentes como Glastonbury, Coachella o Lollapalooza sin que eso alterara su eje. Hay bandas que necesitan escalar constantemente para sobrevivir. The Magic Numbers supieron cómo quedarse en su lugar.
Ahora, en pleno 2025, celebran dos décadas con una gira que comenzó con fechas agotadas en el Reino Unido y Europa, y que recala en América Latina con varias paradas en México y una escala inevitable en Argentina. Buenos Aires, ciudad donde sus canciones siempre encontraron eco, los recibirá con ese fervor tranquilo que sólo los verdaderos fans saben sostener.