Caligaris, la banda cordobesa conocida por su energía contagiosa y La Delio Valdez, la orquesta de cumbia y fiesta por excelencia, han recordado a un ícono de la música tropical. Se trata de una actuación en vivo que rinde homenaje a la inolvidable Gilda y su emblemática canción, “No es mi Despedida”. Este encuentro es el primer adelanto de un disco en vivo de Caligaris.
La magia se desarrolló en el Estadio Monumental de Alta Córdoba, el lugar donde se llevó a cabo la celebración local más grande de la vida de Caligaris hasta la fecha. El motivo de tal celebración fue el vigésimo quinto aniversario de la banda, que marcaron con la gira titulada “#Veinticirco: nunca es tarde para ser un niño”. Sin embargo, lo que hizo que esta noche fuera aún más memorable fue la presencia estelar de los músicos de La Delio Valdez.
Para aquellos que tuvieron la fortuna de presenciar esta velada, el recuerdo sigue vivo como una chispa incandescente. Caligaris, con su característica fusión de ska y otros géneros, hicieron bailar al estadio con su energía. La audiencia se entregó por completo a la música, saltando y cantando al unísono con la banda, creando una atmósfera de alegría inigualable.
Y cuando parecía que la noche no podía ser más emocionante, apareció La Delio Valdez en el escenario. La orquesta de cumbia, conocida por su estilo único y su capacidad para desatar una fiesta en cualquier lugar, inyectó una nueva dosis de entusiasmo en la velada. Juntos, Caligaris y La Delio Valdez interpretaron “No es mi Despedida”, la canción eterna de Gilda que todos conocemos y amamos.
Un Homenaje a Gilda
Gilda, cuyo nombre real era Miriam Alejandra Bianchi, es una figura legendaria de la música tropical y la cumbia en Argentina. Su apodo artístico, “Gilda”, fue inspirado por la película homónima protagonizada por Rita Hayworth en 1946. Este nombre le dio una identidad única en el mundo de la música, y se convirtió en un ícono de la cumbia tropical.
“No es mi Despedida” es una de las canciones más emblemáticas de Gilda y, sin duda, una de las más queridas por sus seguidores. La canción fue lanzada en 2000 como parte del álbum “Gilda: 15 años y un día”, que se convirtió en un gran éxito.
Trágicamente, Gilda falleció en un accidente de tránsito el 7 de septiembre de 1996, a la edad de 34 años, cuando su carrera estaba en pleno auge.
“No es mi Despedida” se convirtió en una especie de himno póstumo para Gilda. La canción ha sido versionada y reinterpretada por numerosos artistas a lo largo de los años.
Este encuentro histórico ha sido inmortalizado en un registro audiovisual. El Estadio Monumental de Alta Córdoba ha sido testigo de una noche inolvidable, y gracias a este lanzamiento, todos podemos revivirla una y otra vez. “No es mi Despedida” en vivo está disponible en todas las plataformas digitales, permitiéndonos sumergirnos en la magia de esa noche cuantas veces queramos.
Pero esto es solo el comienzo. El disco en vivo de Caligaris promete más sorpresas, con otras canciones grabadas en lugares tan diversos como Córdoba, Buenos Aires, México, Colombia, Chile, Costa Rica y los Estados Unidos, durante la gira de #Veinticirco. El lanzamiento completo está programado para finales de este año.