En medio del ruido y el furor de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, Cazzu presentó su primer libro Perreo, una revolución, una obra donde no solo repasa su trayectoria, sino que pone el foco en las tensiones de género que atraviesan la industria musical.
La presentación, realizada en una Sala José Hernández completamente colmada, fue un acto político, íntimo y desafiante. Acompañada por la periodista Romina Zanellato, la artista se detuvo en los temas centrales del libro: la desigualdad, el deseo, el poder y el lugar que ocupa la mujer en el universo del reggaetón. Lejos de un relato complaciente, el texto se posiciona como una crítica lúcida a un sistema que, aún hoy, sigue exigiendo explicaciones a quienes rompen el molde.
Durante años, Cazzu enfrentó una pregunta repetida hasta el cansancio: ¿cómo es ser mujer en un género machista? La cuestión, que rara vez se formula a sus colegas hombres, da pie a una reflexión más profunda sobre las contradicciones del reggaetón: un estilo que, si bien ha perpetuado estereotipos y sexualización, también ha sido terreno fértil para que las artistas tomen la palabra, el cuerpo y el control de su narrativa.
Perreo, una revolución es una bitácora emocional y crítica, escrita desde la experiencia de alguien que supo abrirse paso en un ambiente hostil. Cazzu no se presenta como víctima ni como heroína, sino como testigo y protagonista de una época en la que las artistas urbanas empezaron a ocupar el centro del escenario, no solo con su voz, sino también con sus ideas.
El libro, editado por Penguin Random House, alcanzó el primer puesto en ventas dentro de Amazon, tanto en su formato digital como en audiolibro. El dato no sorprende si se considera la enorme base de seguidores que ha construído la cantante a lo largo de su carrera. Sin embargo, el éxito comercial no opaca el contenido: la obra interpela, sacude y obliga a repensar ciertos discursos que se repiten sin cuestionamiento en la cultura popular.
A través de sus páginas, Cazzu habla de traiciones, obstáculos, aprendizajes y una perseverancia feroz que la llevó de los escenarios locales a los grandes festivales internacionales. Y aunque el foco está puesto en su camino dentro de la música, la lectura trasciende lo estrictamente personal: se vuelve espejo para muchas otras mujeres que encuentran en el arte, en el trabajo y en la lucha diaria, un modo de resistir.
El libro ya circula, la revolución también.