Taylor Swift ha generado furor en los fanáticos latinoamericanos. Después de una etapa exitosa en América del Norte, la superestrella pop trae su Eras Tour a América Latina. La gira comenzará el 24 de agosto en la Ciudad de México y hará paradas en Buenos Aires, Río de Janeiro y São Paulo.
Por primera vez, Swift brindará un show en Argentina y la noticia ha desatado una verdadera locura. La cantante incluirá tres fechas en el Estadio de River Plate, uno de los lugares más emblemáticos y grandes del país. Los shows están programados para los días 9, 10 y 11 de noviembre, brindando múltiples oportunidades para que seguidores de diferentes partes de Argentina puedan asistir y disfrutar del espectáculo.
La experiencia del show en vivo
La cantante es conocida por sus elaborados escenarios y sus coreografías impresionantes. Sus shows cuentan con una producción de alta calidad, efectos visuales deslumbrantes y muchos cambios de vestuario. Además, su voz en directo y su energía en el escenario crean una atmósfera que deja a los fanáticos sin aliento.
El Eras Tour es una celebración de la carrera de Swift y contará con canciones de todos sus álbumes. La gira también contará con invitados especiales, incluidas Maisie Peters y Maisy Stella. En Argentina, la acompañará la talentosa cantante Sabrina Carpenter.
La llegada de Taylor Swift a Argentina para su primera gira es un hito importante para los fans de la vecina orilla que durante años han esperado ansiosamente la oportunidad de ver a su ídola en vivo.
Desde que la noticia se hizo pública a través de las redes sociales, se puso en marcha el “operativo fandom” para conseguir las entradas y obtener un lugar lo más cercano posible al escenario. Tal furor ha provocado la noticia, que ya hay quienes se encuentran acampando a las afueras del estadio, inclusive sin haber conseguido entrada aún. De hecho, se han viralizado consejos muy curiosos en redes sociales, como el uso de pañales durante el show para no tener que asistir al baño y evitar perderse ni un segundo del show.
Un fenómeno que desafía la economía global
El comienzo de la gira norteamericana de Taylor Swift en marzo estuvo marcado por un escándalo relacionado con la venta de entradas. La empresa Ticketmaster agotó dos millones de entradas en un solo día, lo que llevó a precios exorbitantes en la reventa. Esta situación provocó una investigación por monopolio en el Senado de Estados Unidos, donde demócratas y republicanos se unieron para abordar el problema. El impacto de este escándalo sentó un precedente para el resto de la gira y aumentó la expectativa de los fanáticos en Latinoamérica.
En Argentina, el precio oficial de las entradas para el concierto de Taylor Swift oscilaba entre 86.000 y 18.000 pesos argentinos, lo que equivalía a aproximadamente 360 y 75 dólares según el tipo de cambio oficial. Sin embargo, estas cifras eran prácticamente inalcanzables para la mayoría de los ciudadanos debido a la realidad económica del país. La cotización del Banco Central, que fijaba el tipo de cambio en 240 pesos por dólar, se alejaba de la realidad en la calle, donde el valor era de 482 pesos por dólar. Estas disparidades económicas llevaron a que el llamado “dólar blue” se convirtiera en una opción atractiva para aquellos que deseaban asistir al concierto, ya que el precio de las entradas en este mercado paralelo era la mitad del oficial, alrededor de 155 dólares.
La disparidad de precios entre Argentina y Estados Unidos ha generado diversas reacciones entre los fanáticos de Taylor Swift en el país sudamericano. Mientras algunos consideran que las entradas en Argentina están regaladas en comparación con los precios estadounidenses, otros se sienten frustrados por la inaccesibilidad de los boletos. Algunos fanáticos incluso exigen que solo asistan aquellos que estén familiarizados con toda la discografía de la artista, mientras que otros amenazan con violencia si sus amigas se quedan sin entradas y ven a personas con acento extranjero en el concierto. Estas reacciones reflejan la pasión y devoción del público argentino hacia sus artistas favoritos.